jueves, 22 de marzo de 2012

El viernes día 23 de marzo el segundo ciclo hizo una salida extraescolar para visitar la catedral de Málaga así como la Alcazaba de Málaga. Aquí os dejo un vídeo de ambos monumentos y una pequeña historia de cada uno de ellos.
CATEDRAL DE MÁLAGA


La Santa Iglesia Catedral Basílica de la Encarnación es la catedral de Málaga, España. Se trata de un grandioso templo, una de las joyas renacentistas más valiosas de Andalucía. Se encuentra dentro de los límites que marcaba la desaparecida muralla árabe sobre el solar de la primitiva mezquita aljama, el lugar donde los Reyes Católicos Isabel y Fernando ordenaron erigir un templo cristiano a los pocos días de conquistar la ciudad en 1487.
Fue construida entre 1528 y 1782. Las originarias trazas, de estilo Gótico, derivaron en un proyecto renacentista en cuyos planos participaron Diego de Siloé y Andrés de Vandelvira. La catedral es una síntesis de estilos arquitectónicos entre los que prevalece el Renacimiento sobre el primer Gótico de la antigua fábrica y los elementos barrocos añadidos desde principios del siglo XVIII.
LA ALCAZABA DE MÁLAGA

La Alcazaba de Málaga (del árabe qasaba, قصبة, al kasbah, 'ciudadela') es una fortificación palaciega de la época musulmana, construida sobre una anterior fortificación de origen fenicio-púnico.1 Se encuentra en las faldas del monte Gibralfaro en cuya cumbre se halla el castillo del mismo nombre. Alcazaba y castillo están unidos por un pasillo de monte resguardado por dos murallas zigzagueantes o rampantes llamado la Coracha.
Ocupaba el extremo oriental del desaparecido recinto amurallado de la ciudad, como todas las alcazabas musulmanas, de manera que los frentes de mediodía, poniente y norte quedaban a intramuros.
La Alcazaba es una edificación del siglo XI construida sobre la roca y en la que destaca la armoniosa conjunción de las necesidades defensivas y la serena belleza de sus estancias y jardines interiores; como obra militar, es la más importante musulmana conservada en España.
Para llegar a la parte más elevada, donde habitaban el alcalde o cadí de la ciudad, era necesario atravesar desde el interior de la ciudad tres recintos concéntricos amurallados y alargados, y ocho puertas fortificadas; dos de ellas en recodo, que daban seguridad a sus habitantes, tanto a los reyes y gobernadores musulmanes, que habitaron el palacio nazarita, como a los que moraron en el arrabal a intramuros. La presencia de torres albarranas con saeteras y murallas almenadas también aportan importantes elementos defensivos. Desde los balcones del palacio se puede observar una panorámica excepcional de la bahía.

No hay comentarios: